Desde su origen, la atención psiquiátrica se concibe mayoritariamente como “Hospitalocéntrica”, centrando las intervenciones en un lugar de encierro, alejado de la comunidad. Promoviendo que el concepto de “locura” se impusiera con una alta carga de estigma y segregación. Desde sus inicios los Hospitales psiquiátricos se configuran como espacios de normalización y de re-estructuración de la subjetividad, con una asimetría de relación de poder entre sujeto y profesional. Que puede ser el Médico tratante u otros profesionales de Salud Mental, encargados de determinar los distintos tratamientos. A veces inclusive sin consentimiento del sujeto en cuestión, estando avalados porque el otro “no tiene consciencia”. Frente a esta situación, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) junto con la Organización Mundial de la Salud (OMS), intentan generar un cambio estructural en el diseño de la atención psiquiátrica. Buscando la inclusión social y empoderamiento de las personas diagnosticadas con algún trastorno psiquiátrico. Evidenciando el origen de un enfoque de trabajo, en el cual tanto la experiencia subjetiva como la epidemiología son necesarias para lograr un cambio de paradigma en Salud Mental.
¿Por qué hablar de Salud Mental? Actualmente de las 10 primeras causas de discapacidad en el mundo, cuatro corresponden a trastornos psiquiátricos, con una alta carga de sufrimiento humano y de pérdida económica. Conformándose en un problema de Salud Pública, tanto sus causas como las propias consecuencias del tratamiento.
Principales causas de años de vida ajustados por Discapacidad (Estimación para el año 2000) | ||
1 | Trastorno Depresivo Unipolar (Depresión) | 11,9% |
2 | Pérdida de Audición iniciada en la adultez | 4,6% |
3 | Anemia por deficiencia de Hierro | 4,5% |
4 | Trastorno Pulmonar Obstructivo | 3,3% |
5 | Trastornos Relacionados con el consumo de Alcohol | 3,1% |
6 | Osteoartritis | 3,0% |
7 | Esquizofrenia | 2,8% |
8 | Caídas | 2,8% |
9 | Trastorno Afectivo Bipolar | 2,5% |
10 | Asma | 2,1% |
- Fuente: Informe anual de la Salud, 2001. Organización Mundial de la Salud
Estudios fueron demostrando que la exclusión y aislamiento social de aquellos que presentan un diagnóstico psiquiátrico severo, no soluciona el problema individual ni social. La institucionalización implica mayor gasto económico tanto para el Estado como para la familia y el sujeto. La OPS junto con la OMS en 1990 realizan una conferencia en la cual se insta a la generación de reformas psiquiátricas en América Latina y el Caribe; La Declaración de Caracas. En ella se describe que la hospitalización, como única y principal forma de atención, promueve el aislamiento, generando lo que llaman “discapacidad social”. Se generan condiciones desfavorables que ponen en riesgo los derechos humanos y civiles y que se utilizan gran cantidad de recursos financieros y humanos destinados a la salud mental. Además, se dificulta la educación de la población y genera un aumento del estigma asociado a las enfermedades psiquiátricas, porque si lo pensamos de forma rápida ¿a quién se “encierra”?. A quienes la sociedad considera como peligrosos. Promoviendo así, el mito de que quien padece esquizofrenia u otra enfermedad psiquiátrica severa es violento o representa un peligro.
Entonces, ¿en qué consistieron las medidas propuestas? Fundamentalmente se adopta un nuevo paradigma, con un enfoque comunitario, que promueve el fortalecimiento de la atención primaria en Salud Mental, considerando que esta estrategia podría contribuir para llegar a la meta de Salud para todos en el año 2000. Declarando que los programas de psiquiatría debían re-estructurarse en modelos de promoción alternativos basados en la comunidad, manteniendo al sujeto dentro de su comunidad y sus redes sociales. Limitando la estadía en Hospitalizaciones cerradas a nula o períodos muy cortos. Además describe la necesidad de capacitar a profesionales de la salud mental, para que el nuevo paradigma sea llevado a cabo, y no quede solo en teoría.
¿Se logran imaginar lo que es estar vulnerable y solo? ¿Qué tipo de tratamiento puede tener un índice de logro a largo plazo si la respuesta es aislar y no modificar las relaciones que establecemos con el ambiente? Una propuesta radical es la invitación a criticar el papel céntrico y todopoderoso que hasta esa fecha habían tenido (y en la práctica siguen teniendo) los Hospitales Psiquiátricos. Entendiendo que el foco de atención debe encontrarse en el resguardo de la dignidad y derechos de quien presenta un trastorno psiquiátrico. Esto genera un cambio en planes y programas de los países pertenecientes a la OPS. En Chile, en el año 1990 se genera un nuevo Plan Nacional de Salud Mental que se implementa en 2000, cambia la forma de atender a los pacientes psiquiátricos, formando nuevas instituciones que centran su atención en Salud Mental desde la comunidad. Además se empodera a familiares y pacientes promoviendo la generación de grupos de apoyo mutuo, quienes comienzan a adquirir mayor autonomía en su proceso de rehabilitación.
A pesar de estos avances, aún hace falta avanzar en la efectividad de intervención, no sólo Latinoamericana, sino que a nivel global. En Andalucía, un 21,1% de la población mayor a 16 años, está en riesgo de presentar alguna patología psiquiátrica. Una reciente encuesta de la OMS reveló que más del 40% de los países carecen de política de salud mental; más del 30% de los países carecen de un programa de salud mental; más del 25% de los países carecen de medicación psiquiátrica básica en la atención primaria de salud; y el 70% de la población mundial tiene acceso a menos de un psiquiatra por 100000 habitantes. Como profesionales de Salud Pública debemos seguir generando información y desarrollando políticas que mejoren el acceso y atención oportuna de todo aquel que lo requiera. Entregando oportunidades de acceso y mejoras a los planes de salud pública ya existentes. Debe fortalecerse la atención primaria en Salud Mental, orientando a los Hospitales en la hora de hacer derivaciones. Capacitar a los profesionales sobre intervención comunitaria y trabajo en red, propendiendo al trabajo interdisciplinar. Junto con la educación a la comunidad y familiares de personas con diagnósticos psiquiátricos. Aunque estas reformas promueven un cambio de paradigma, aún debemos continuar la lucha por la inclusión social, realizando investigaciones de Salud Pública que evalúen la percepción de los pacientes y familiares, y la calidad de la atención para realizar las modificaciones necesarias.
Muchas gracias Carolina por tu artículo. Me ha parecido un tema muy interesante que has abordado muy bien. Desde la primera imagen que he visto, la de los pájaros, me has enganchado en tu discurso al transmitirme el deseo de libertad que quieres para tus pacientes, esa necesidad de liberación de un sistema injusto.
En el caso de España, en el año 1986 se aprobó la Ley General de Sanidad donde los enfermos mentales dejaban de ser tratados como ciudadanos de tercera, se ofrecía a los enfermos la posibilidad de ser tratados como cualquier otro paciente y además, hacerlo en su entorno sociocultural. Además, los centros psiquiátricos dejaron de llamarse “manicomios” para pasar a ser centros de salud mental. Pese a ello, esta ley parece ser que se quedó sólo en el papel ya que 31 años más tarde la enfermedad mental sigue siendo muy estigmatizada, los profesionales de la salud siguen tratando de manera diferente a estos enfermos y desde las administraciones no se hace nada por mejorarlo. Se necesitan más psicólogos, más terapeutas, más trabajadores sociales y menos prescripción de fármacos para tratar cualquier síntoma. No quiero decir tampoco que no se haya hecho nada pero, es cierto, que se necesita hacer aún más ya que estas medidas que se crean no llegan a la población diana que podría beneficiarse.
Me parece sorprendente que le demos tan poca importancia desde la salud pública a este tema. A veces pienso que es porque el público debe de reconocer como enfermedad mental únicamente a la esquizofrenia y al trastorno bipolar. Deben de creer que la ansiedad crónica que sienten día a día por la cual son infelices es un regalo divino y no un problema de salud mental que tiene solución; que la depresión, la primera causa de incapacidad a nivel mundial, debe afectar sólo a algunas personas y ellos se sienten libres de padecerla; o la adicción al alcohol y otras drogas no son problemas que requieran su atención.
En cualquier caso, me parece un tema muy acertado que te hace reflexionar del problema que existe y de todo lo que aún nos queda por hacer.
Me gustó mucho tu artículo, tanto por el estilo que el tema, la salud mental y el internamiento psiquiátrico. Aun no estoy muy familiarizada (creo…) con los trastornos psiquiátricos, me llevo a reflexionar sobre varios aspectos. ¿Quién decide de la hospitalización? ¿Está siempre justificada y adaptada? Me parece una forma bastante expeditiva de “resolver” los problemas. Además me pregunto ¿qué es la “normalidad”? Por ejemplo, me conmovió mucho la película “Un ángel en mi mesa” de Jane Campion sobre la autora neozelandesa Janet Frame. A ser diferente y revelar a su profesor sus escritos, fue internada 8 años por esquizofrenia en un asilo psiquiátrico. Recibió descargas eléctricas (más de 200) y escapo de la lobotomía gracias a su familia con el reconocimiento de su obra. Un estudio sobre lobotomía en France, Suiza y Bélgica de 1935–85 revelo que 84% de los 1340 sujetos (¿victimas?) eran mujeres y que 22 niños fueron lobotomizados por agitación psicomotriz para “restaurar paz en casa”. Un practica que ahora está condenada.
https://www.nature.com/nature/journal/v548/n7669/pdf/548523e.pdf
También me parece terrible que una persona pasa la mayor parte de su vida en un hospital psiquiátrico, muchas veces contra su propia voluntad. La escultora Camille Claudel fue internada los últimos 30 años de su vida. En una exposición a Avignon, he leído sus cartas dónde cuenta su soledad y pregunta cuando su familia vendrá a buscarla. Nunca recibo visitas, salvo de su hermano Paul Claudel quien la hospitalizo (la visito siete veces…) y nunca salió del “manicomio” a pesar de su recuperación (fuente: Wikipedia). No todos los destinos de pacientes internados salen a la luz. Es verdad que queda mucho por hacer. Por ejemplo, un artículo de Human Right Watch denuncia la inadecuación de la atención de la salud mental en las cárceles francesas en un informe “Double Punishment – Inadequations for Prisoners with Psychosocial Disabilities in France”
https://www.hrw.org/fr/news/2016/04/05/france-des-soins-de-sante-mentale-inadaptes-dans-les-prisons
Me parecen muy interesantes tus proposiciones para cambiar la forma de atender a los pacientes psiquiátricos, en particular el enfoque comunitario y las reformas para mejorar la inclusión social. Muchas gracias por tu artículo, es muy apasionante.