
Queridos Reyes Magos:
Este año, y ya llevo varios así, he sido muy bueno.
He ido a trabajar todos los días con la ilusión, casi, de cuando terminé la carrera, pero esa ilusión era difícil de mantener durante toda la jornada.
He pasado consulta a una lista llena de pacientes de mi cupo y de todos los compañeros que no están cubiertos por múltiples incidencias, ya sea por vacaciones, bajas, asistencia a cursos o congresos, salientes de guardia y otras muchas cuestiones que no logro enumerar.
Aparte he visto una no desdeñable cantidad de pacientes sin cita, que no pueden esperar porque su demanda es siempre “urgente”, aunque esa demanda sea sólo que se le ha acabado el tratamiento y no tienen pastillas para tomarlas dentro de una semana (para antes sí les queda, pero “por si acaso”).
Cuando al final he podido terminar la consulta me he dedicado a ver todos los correos y notas que me ha dejado el director de mi Unidad, para lograr cumplir unos objetivos que no siempre me parecen acordes con la realidad de nuestra situación, pero que asumo que nuestro equipo debe intentar, al menos conseguir, porque debe ser que si nos los indican deben redundar en una mejora en la salud de nuestra población.
Casi sin tiempo, he atendido a otro tipo de consultas, menos mal que no todos los días, pero sí de forma periódica, he hecho cirugía menor, he visto las retinografías de los pacientes diabéticos, he atendido a mis pacientes embarazadas, he hecho alguna que otra citología para cribado de cáncer de cérvix, estoy aprendiendo a poner DIUs, y le he hecho fotos a lesiones cutáneas de algunos de mis pacientes para mandarlos al Dermatólogo por Teledermatología.
Todo esto lo he hecho mientras intentaba hacer docencia a mi residente de primer año y a un alumno de 6º de medicina que está rotando conmigo durante seis semanas.
Cuando hemos terminado tenía dos avisos a domicilio de pacientes que no pueden venir a consulta por motivos de edad y falta de movilidad, y, además tenía programada una visita a otro paciente de esas mismas características para revisar su tratamiento y estado.
Todo esto tengo que meterlo en las siete horas laborales de cada día, que a veces tienden a alargarse un poco más y que tengo que realizar en lo que se supone sería mi horario libre de trabajo.
Menos mal que hoy no tenía guardia, porque si no tendría que haberme ido al centro donde hago mi horario de lo que llaman “atención continuada”, donde en realidad sigo pasando una consulta muy parecida a la que tengo en mi centro, pero con la diferencia de que los pacientes no tienen que pedir cita, y pueden ir a la hora que les venga bien aunque sea por motivos banales, pero eso daría para otra carta.
Es por esto que creo que no he sido demasiado malo ni travieso, y me gustaría que me pudieseis regalar, para el año que viene, una lista motivada de deseos que no serían sólo para mí, sino que pienso que les vendrían bien a mis compañeros y a mucha más gente, gente que ahora llamamos clientes, usuarios, ciudadanos, dependiendo de lo elegantes que queramos parecer.
En primer lugar me gustaría tener tiempo. Tiempo para hacer mejor mi trabajo, sin agobios que puedan hacer que me equivoque, y para tratar mejor a mis pacientes, mirarles a los ojos y que sientan, aún más, que estoy ahí.
En segundo lugar quisiera que la gente me tratase con respeto. La mayoría ya lo hace, pero cada vez son más los que me juzgan incompetente antes de que hable, o piensan que sólo soy alguien que tiene que hacer aquello que ellos tienen como correcto, aunque puede ser que estén mal asesorados, quizá por el Doctor Google. Una posibilidad que os propongo es que intentéis educar a la gente en cuanto a salud se refiere.
En tercer lugar tendría que tener tiempo para reciclarme, pero no en mi tiempo libre, sino como algo inherente a mi trabajo, ahora os aseguro que es imposible.
En cuarto lugar pienso que deberíais hacer que tuviésemos plantillas suficientes para poder absorber todas las incidencias que ocurren en el trabajo diario, teniendo en cuenta que nuestros profesionales tienen una media de edad avanzada y las eventualidades que ocurren son frecuentes.
En quinto lugar, y no por ello menos importante, me gustaría que, además de mejorar nuestras condiciones laborales, nos mejoraseis el sueldo. Creo que eso dignificaría un poco más nuestro trabajo.
Por último, y no quiero extenderme más, el año que viene si eso os mando otra carta, quiero que hagáis las cosas pensando en la gente, en lo que le viene bien, no en lo que va a tenerlos contentos o entretenidos.
Nada más, estoy seguro de que vais a ser generosos como siempre, y espero que lo seáis, porque si no, y no es una amenaza, todos los que somos buenos estamos llegando a un límite, y podemos dejar de creer en los Reyes Magos. 

¡¡Eres un guerrero¡¡¡. ¡¡¡Soy una guerrera¡¡¡. Soy médico de familia , y me siento como médico en el sentido amplio de la palabra ,afortunada, no podría haber hecho mejor elección en mi vida . Creo firmemente en la medicina basada en la evidencia , pero también en la medicina basada en la experiencia , en la medicina energética y en la medicina humanista… en mi carta de los reyes magos pido seguir cultivando mis creencias , manteniendo la ilusión por lo que hago, sembrar la esperanza en las personas …en los pacientes… en los profesionales….
Me sumo a tus deseos para este año, de los pero también quiero aprovechar esta oportunidad para pediros a los reyes que os llevéis algo ,¡¡si queridos reyes¡¡ . Mi petición es que cuando volváis y regreséis a vuestras lejanas tierras de Oriente, os llevéis con vosotros, en vuestras alforjas, la precariedad y la desigualdades de aquellos que optan por trabajar en Andalucía y que cuenta con «los sueldos más bajos de España», la temporalidad de los profesionales , la situación de vulnerabilidad y deterioro de las plantillas, la creciente presión asistencial, las agresiones a profesionales, la confusión, la ansiedad y frustración que genera a los profesionales el día a día ….porque al final, nuestro único y gran deseo Queridos reyes es ser Médico de Familia.
Los médicos en general, y en particular los de atención primaria estamos pasando por unos momentos dificiles. Ni las organizaciones, ni los sindicatos, ni las sociedades científicas, ni el tejido social tiene en cuenta la sobrecarga, presión, precariedad, desigualdad salarial, agresiones , que desde hace años venimos sufriendo. En mi carta a los Reyes Magos voy a pedir que se solucionen todas estas injusticias y que podamos dar un servicio de calidad y humanizado.
Los médicos en general y los médicos de familia en particular, sois Reyes magos para muchísima gente a la que tratáis y/o simplemente escucháis. Yo he pedido Salud para todos ….la falta de tiempo, la precariedad, la mala educación cada vez más instaurada en la sociedad la tendremos que ir solucionando los terrenales poco a poco….
Feliz Navidad!
FELIZ NAVIDAD, 🎁 🎄 y que en realidad alguien se convierta en Rey Mago, y tome las riendas del camello que es la Sanidad Andaluza para conducirlo a un buen puerto. Los «terrenales» como dices, necesitamos apoyo y aliento de nuestros Reyes Magos, necesitamos sentirnos respaldados, porque, como decía, nuestra infinita ilusión, está comenzando a ser finita a base de golpearnos contra muros incontenibles. Pero ahí seguimos, tirando para adelante, otro año más, con todo por hacer de nuevo y ganas, que no falten.
Me ha gustado tu carta Peleón, ¿Crees que si le cambio el nombre y la pongo como mía, me harán caso a mí también los Reyes Magos?, claro , para el año que viene…
Ya han pasado los Reyes y en mi Centro de Salud han traído algo más de paz por la mañana y más personal sanitario.
Tan sólo les he pedido que durante este año, las personas que necesitan consejo médico/sanitario/social tengan un poquito de aliento y respuesta al tratar con alguno de nosotros.
Espero que se cumplan todos vuestros deseos.
Abrazos y besos.
¡Me ha encantado tu carta a los Reyes¡ Tienes muchisima razon, todo lo que pides y es justo y necesario: tiempo para atender a los pacientes con calma, sin prisa… ¿qué menos? .
Educacion y respeto del paciente y familiares al trabajo que desarrollamos, por supuesto… ¡que desaparezcan las agresiones al personal sanitario¡
Que nos oferten cursos formativos para estar al día y reciclarnos, sin que sea del tiempo personal.
Que se adecúen las plantillas a las necesidades reales de cada sitio, que nos mejoren el salario (al menos que no estemos en la cola de las CCAA) y las contrataciones…
¿Donde hay que firmar? porque solo puedo estar de acuerdo… Yo pediría incluso más. Sin embargo estoy convencida de que poco a poco iremos ganando puntos en estas cuestiones tambien, convencida de que cuanto más a gusto trabajemos los profesionales, sabremos ofrecer una atencion sanitaria de mayor calidad.
Me siento totalmente identificada con tus reivindicaciones. Pero me temo esta vez los Reyes Magos pasaron de largo y dejar algo de tu larga lista. Si tuviera que elegir tan solo uno de los deseos, no lo dudo, me quedo con el deseo de tener mas tiempo para aportar calidad y calidez a cada un de las acciones que realizamos a diario. Tiempo para atender a nuestros pacientes es la herramienta mas costo efectiva de todas las que disponemos, mucho mas que cualquier otro avance tecnológico y a cada uno de nuestro paciente el tiempo que necesite ni un minutos mas, ni un minuto menos. No se si me imagino pasando una consulta sin mirar constantemente el reloj. En fin, el próximo año lo volveremos a pedir