Durante estos meses de pandemia y confinamiento en muchos hogares ha predominado la angustia y la inseguridad.
En mi consulta del centro de salud de Vallecas, he visto como la preocupación sobre la salud física, ha ido pasando a un segundo lugar. La mayor parte de las preocupaciones ahora son económicas, por falta de trabajo y recursos: los contratos precarios, la situación irregular de muchos vecinos hace que ni siquiera cuenten en las estadísticas y que su situación sea de una extrema urgencia social.
Como bien sabemos, las crisis económicas conllevan “crisis” en el bienestar emocional, normalmente directamente relacionado a su capital económico, como nos muestran estos estudios de 2011 (OMS) 1 y 2014 2(Informe SESPAS 2014).
Según los primeros datos que disponemos sobre salud mental y confinamiento durante la crisis de la COVID, volvemos a ver cómo las desigualdades sociales y las personas con condiciones más desfavorecidas son las que sufren más las consecuencias del confinamiento.
Este estudio con datos de Italia, España y Reino Unido, muestra cómo los ingresos de los que dispongas, la ausencia de deudas, tener casa propia, tamaño de la vivienda, el tener asegurado el trabajo y ahora muy importante, disponer de conexión a internet, son factores protectores a la hora de afrontar el confinamiento con mejor salud mental3
En mi consulta de Atención Primaria también veo cómo la brecha de género y la carga de cuidados ha aumentando. Las mujeres son las que preguntan mayoritariamente sobre la salud del resto de la familia. Sabemos de sobra que ser cuidadora informal repercute negativamente sobre la salud mental de las personas, y sabemos también de sobra que esta tarea es llevada a cabo principalmente por mujeres4.
Con la suspensión de actividad en colegios y centros de mayores, las mujeres han vuelto a cargar sobre sus hombros la atención a hijos/as y padres, muchas veces haciendo malabares con su teletrabajo, como reflejan en el blog de la EASP5 (aquí)
Pero , ¿cómo responderemos a todo esto? La respuesta colectiva y a nivel institucional e internacional que se dé, marcará cómo saldremos de todo esto: con mirada de equidad e intentando reducir las desigualdades sociales, o por el contrario, obviándolas y aumentado las desigualdades y las injusticias sociales.
Las estrategias recomendadas por la OMS6 :
- Priorizan el refuerzo de la estructura sanitaria pero con una orientación comunitaria “Comprender el conocimiento, las conductas, las percepciones e identificar los canales adecuados y las redes e influencias basadas en la comunidad …serán un factor clave de la eficacia de la respuesta”
- Apoyo material a las personas vulnerables, como hemos visto factor esencial para “calmar” la angustia emocional, como la llamada renta mínima, probablemente incluso insuficiente, ya que por ejemplo, de este derecho se quedan fuera la mayoría de mis pacientes migrantes.
- Estrategias pensadas para niños/as y jóvenes: ser joven supone un factor de riesgo a la hora de afrontarlo7, quizá por la incertidumbre del futuro (artículo)
- Planes específicos para la prevención del suicidio.
- Prestar atención a la violencia de género8 agudizada en estos momentos (enlace)
Como hemos visto, este virus sí entiende de clases sociales y de fronteras. De nuevo el código postal (dónde hayas nacido y tus determinantes sociales) influye más que tu código genético en la vulnerabilidad frente a la COVID 19.
Respuestas institucionales justas, centradas en al cuidado y en el valor de lo colectivo y la comunidad , permitirán que salgamos de esta gran crisis siendo una sociedad más fuerte y cohesionada con mayor percepción de bienestar. De lo contrario, tendremos una sociedad más desigual, con peor salud mental y emocional, en definitiva, una sociedad más enferma.
Bibliografía
- Impact of economic crises on mental health . 2020. WHO
- Javier García Campayo, Miquel Roca. Crisis económica y salud mental. Informe SESPAS. Junio 2014
- Cristiano Codagnon, Francisco Lupiañez-Villanueva, et al. Estudio sobre los efectos del Covid-19 y el confinamiento en Italia, España y Reino Unido Primera ola. 2020.
- Roca Roger. Úbeda Bonet.et al. Impact of caring on the health of family carers. Atención Primaria. Elsiver. 2000
- María del Mar García Calvente, María del Río Lozano y Gracia Maroto Navarro. Blog EASP. Género, cuidados y coronavirus: antes, durante y después de la pandemia. Disponible en: https://www.easp.es/web/coronavirusysaludpublica/genero-cuidados-y-coronavirus-antes-durante-y-despues-de-la-pandemia/
- Actualización de la estrategia frente a la COVID 19. Organización Mundial de la Salud. 14 de abril 2020
- Ausín Profesora Contratada ,Berta. González, Clara .Castellanos Miguel Ángel. López-Gómez, Aída. Saiz Carolina Ugidos, Jesús. Estudio del impacto psicológico derivado del COVID 19 en la población española (PSI-COVID-19). UCM13 de abril de 2020
- ONU Mujeres. COVID-19: Un lugar protagónico para las mujeres. Declaración de Phumzile Mlambo- Ngcuka, secretaria general adjunta de las Naciones Unidas y Directora Ejecutiva ONU mujeres. Viernes, 20 de marzo 2020. Disponible: https://www.unwomen.org/es/news/stories/2020/3/statement-ed-phumzile-covid-19-women-front-and-centre