Hoy, 20 de marzo de 2020, además de la llegada de la primavera, celebramos también el Día Mundial de la Felicidad.
Es una celebración agridulce. El fenómeno “coronavirus” nos ha obligado a aplazar la Jornada sobre la Prevención del Suicidio que íbamos a celebrar hoy, precisamente para empezar a ver otras formas de abordaje “distintas” que sumen alternativas, que añadan opciones en un tema tan complejo y esencial como es el del suicidio. Esa jornada, como ya anuncié en anteriores entradas del Blog, se ha trasladado al viernes 19 de junio.
Por otro lado, sí me gustaría aprovechar este Día Mundial de la Felicidad, para añadir una quinta dimensión a esa SALUD PRÁCTICA que traduce ese amplio concepto de FELICIDAD en aspectos concretos, que son los que más nos interesan a la ciudadanía.
Hasta hora, manejábamos ya con cierta soltura 4 dimensiones de la salud: la biológica, la psicológica, la social y… ¡¡ la espiritual !! Esa cuarta dimensión que tanto nos costó incorporar; pero que, a partir de la «histórica» Jornada que celebramos en la EASP en octubre de 2017, se ha ido instalando (evidencia científica mediante, claro) en Cursos, Congresos, Reuniones y Jornadas varias.
Bien, pues hoy 20 de marzo de 2020 incorporamos una quinta dimensión clave para lograr una salud más integral, más plena y, por tanto, una felicidad mayor y más sostenible. Esa quinta dimensión es….
https://www.youtube.com/watch?v=9-sEQl7RhiE
La dimensión ÉTICA, esa dimensión que ya hace años llamamos en la EASP el “alma” de la Salud Pública y que se sustancia en ese doble objetivo (irrenunciable, innegociable): Mi bienestar y tu bienestar, mi poder y tu poder, mis objetivos y tus objetivos. Ese “ganar-ganar” que Carlo Cipolla nos enseñó en su estrategia inteligente. Y ese “amarás al prójimo como a ti mismo” que ya encontramos en la Biblia. No inventamos nada, cierto. Lo que sí hacemos es incorporar esa dimensión a todas y cada una de nuestras acciones como profesionales de la salud y como pacientes (activos); como dirigentes y como ciudadanos; como empresarios y como trabajadores; como alumnos y como docentes; como familiares y como amigos. Como seres humanos solidarios.
A ver si así conseguimos aquello que propongo últimamente en mis conferencias: “De tanto comportarnos como seres humanos éticos, volveremos a sanarnos física, emocional, social y espiritualmente.”
El fenómeno “coronavirus” nos ofrece una oportunidad única para pasar, ya, a la acción ¡¡¡¡ Adelante !!!!
Gracias Joan Carles.
Gracias Mariola.
Gracias Josep.
Sin vosotros esto no hubiera sido posible.
Con un cálido abrazo (virtual y profundo a la vez) desde Granada
José Luis Bimbela Pedrola
PD: Y un regalo anti-miedos, CON TODA MI ALMA:
http://www.index-f.com/memoria/12/12300.php